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    No hay nada como el olor de pan recién hecho en casa. Con solo inhalar el aroma, se siente un ambiente hogareño, al menos para mí. Y cuando le agregas queso cheddar, romero fresco del jardín y ajo picante a la mezcla, obtienes un rico pan aromático con un sabor único. 

     

    Información adicional

    • Sirve: 12 porciones
    • Tiempo de preparación: 60 minutos 

    Ingredientes

    • 3 tazas de harina más 1 cucharada (puedes conseguir varias por nuestro app)
    • 2 cucharaditas de polvo de hornear
    • 1 cucharadita de sal kosher
    • 6 cucharadas de mantequilla sin sal, fría y dura
    • 4 onzas de queso cheddar añejado naturalmente, rallado
    • 6 dientes de ajo muy finamente picados
    • 2 cucharadas de romero fresco, finamente picado
    • 1 taza más 2 a 4 cucharadas de suero de leche, más una cucharada adicional para cepillar

    Preparación

    1. En un tazón grande, mezcle la harina, el polvo de hornear y la sal. Ralle la mantequilla sobre el tazón, deteniéndose para revolver y cubra los trozos de mantequilla con la mezcla de harina cada 10 segundos. Pellizque la mezcla con las yemas de los dedos hasta que se desmorone, como arena húmeda. Reserve 2 cucharadas de queso cheddar rallado y agregue el queso cheddar  restante, el ajo y el romero a la mezcla de harina y revuelva suavemente para distribuir uniformemente.
    2. Agregue 1 taza más 2 cucharadas de suero de leche, dividiendo las adiciones en 4, revolviendo suavemente durante 10 segundos después de cada adición con un tenedor. Si es necesario, agregue 2 cucharadas adicionales de suero de leche para ayudar a que la masa se una (la cantidad de suero de leche depende de qué tan húmedo o seco esté el ambiente de cocción). La masa debe mantenerse unida cuando la apriete en su mano.
    3. Enrolle suavemente la masa en un rectángulo de 1 pulgada de grosor, luego doble el rectángulo. Dele palmaditas en la masa doblada, gírela de manera que quede a lo largo (esto hará que sea más fácil de extender) y enróllela hasta que tenga un grosor de 3/4 de pulgada. Use un cortador de galletas redondo de 2 1/2 pulgadas para cortar el pan. Dele palmaditas a la masa restante en forma de rectángulo áspero, luego extiéndalo hasta que tenga un grosor de 3/4 de pulgada y córtelo con el cortador de galletas nuevamente para sacar la mayor cantidad posible de panes de la masa restante. Debería terminar con 12 a 14 panes.
    4. Voltee la masa (la parte inferior suele ser más plana y más atractiva) y coloque los panes en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino, espaciados aproximadamente a 1/2 pulgada de distancia. Cúbralos y colóquelos en el congelador durante 30 minutos.
    5. Precaliente el horno a 425 grados F. Unte ligeramente la parte superior de cada pan con suero de leche y espolvoree con una pizca del queso cheddar rallado restante. Coloque en el horno y hornee hasta que la parte superior del pan esté dorada, aproximadamente de 17 a 20 minutos.

    Consejos y comentarios

    • Es importante mantener fríos todos los ingredientes no secos, porque la mantequilla debe permanecer firme y fría hasta que se hornee, de lo contrario, las capas escamosas de la galleta no se formarán correctamente.
    • Cuando todos los ingredientes están incorporados a la masa, me gusta extenderla en un rectángulo, para crear capas aún más escamosas.Luego extiendo esta masa doblada y corto las pequeñas formas de galleta.
    • Recomiendo usar un cortador de galletas redondo de 2.5 pulgadas para esto

    ¡Espero que esta receta haya sido de su agrado y que pueda integrarla en sus comidas!

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